Eso me hizo pensar cuando empecé a escribir.
Creó que fue un día de esos, oscuros, tristes y desolados, que cogí mi celular y me desahogué escribiendo todos los por qué…
Por qué me pasa, por qué tuve que pasar, por qué no lo siento, por qué soy cristiana, por qué no hay soluciones, por qué estoy en el lodo.
Una semana donde solo cogía el celular a escribir por qué, luego agarré hojas sueltas donde simplemente rayaba esos primeros por qué de por qué suceden las cosas…
Hasta que un día en mi simple lavandería, mientras fregaba la ropa vi los montes de mi casa y algo se veía a lo lejos y mientras lo ignoraba, algo me decía, ahí hay algo.
Recuerdo pensar, estoy loca y después de escribirlos con todos los horrores ortográficos se lo leí a mi esposo y fue la primera vez que me dijo guárdalo, está increíble, algún rato lo puedes usar.
Y pues así fue, lo guardé, varios días después me venían más cosas vividas con respuesta de parte de Dios.
Todos mis por qué respondidos en escritos.
Hasta que dije quiero más de ti y un día en mi cumpleaños en plena pandemia me dio el mejor escrito, el por qué yo soy su hija, escogida y amada.
Y así fue como en el 2019, 2020, 2021, 2022, 2023 se fue llenando de los escritos de Dios para todas las personas que quieran decirle:
“Papá, quiero más de ti en mí, por siempre”
